Contenido
- Características generales de la enfermedad.
- Razones de la aparición
- Signos y síntomas
- Infectados o no: rutas de transmisión
- Clasificación de infiltrados
- Redondo
- Formación de nubes
- Desarrollando como neumonía caseosa
- Lobitis tuberculosa
- Periscisurita (regional)
- Basal
- Induración broncobulillar
- Tamaños y fases de desarrollo
- Reabsorción
- Sellando
- Decaer
- Siembra
- Características clínicas del curso de la tuberculosis pulmonar infiltrativa.
- Métodos de diagnóstico
- Diferencias diferenciales
- Principios de tratamiento
- Terapia de drogas
- Intervención quirúrgica
- Remedios caseros
- Pronóstico de recuperación
- Posibles complicaciones
- Métodos de prevención
La tuberculosis es una enfermedad infecciosa grave que afecta predominantemente al sistema respiratorio inferior. En el 60-70% de los casos, aparecen focos inflamatorios (infiltrados) en los pulmones, que consisten en células inmunes, fibrina y epitelio.
Con un curso prolongado y la ausencia de terapia, la tuberculosis infiltrativa se complica por la formación de tuberculomas y cavidades, neumonía caseosa e intoxicación grave.
Características generales de la enfermedad.
La forma infiltrativa de la enfermedad se acompaña de la formación de formaciones exudativas-inflamatorias, en el centro de las cuales hay una desintegración del tejido pulmonar.
Razones de la aparición
Esta patología es siempre secundaria. Se desarrolla cuando se reactivan viejos focos infecciosos o cuando una gran cantidad de varillas de Koch penetran en áreas de los pulmones que han estado previamente en contacto con este patógeno.
En el primer caso, la formación de una zona de infiltración es una reacción a la progresión de la enfermedad. Los tejidos circundantes se inflaman y el exudado comienza a segregarse.
En el segundo caso, la formación de grupos de células se asocia con la respuesta inmunitaria a la penetración masiva de bacterias. En áreas previamente sensibilizadas, se desarrolla un intenso proceso inflamatorio, que se acompaña de la formación de infiltrados.
Por lo tanto, esta forma de tuberculosis se desarrolla solo en presencia de inmunidad específica (secundaria) a la enfermedad. El desarrollo de anticuerpos específicos contra el patógeno es posible ya sea con el contacto constante con los pacientes o con el desarrollo de una infección dentro del cuerpo.
Los factores de riesgo de infección primaria y secundaria son:
- adicción al alcohol, la nicotina y las drogas;
- estilo de vida asocial, malas condiciones sanitarias e higiénicas;
- enfermedades de los sistemas endocrino, respiratorio y cardiovascular (diabetes mellitus, asma bronquial, enfisema, neumonía crónica, insuficiencia cardiopulmonar, etc.);
- enfermedades profesionales asociadas con intoxicaciones periódicas con reactivos químicos y otros contaminantes;
- estrés;
- el embarazo;
- VIH, otras formas de inmunodeficiencia;
- tomando inmunosupresores;
- desnutrición, deficiencia de vitaminas.
La infección primaria y la reinfección a menudo ocurren a través del contacto constante con un paciente con una forma abierta de la enfermedad. La tuberculosis infiltrativa se diagnostica principalmente en pacientes jóvenes.
Signos y síntomas
El proceso secundario puede ser agudo, asintomático o asintomático. El rápido desarrollo de la patología se observa en el 15-20% de los pacientes, gradual, en el 50-60% y latente, en el 20-25%.
La forma infiltrativa de la enfermedad se acompaña de las siguientes quejas de los pacientes:
- fiebre (la temperatura se mantiene en el rango de + 38... 38.5 ° С durante 2-3 semanas);
- tos húmeda, hemoptisis;
- aumento de la sudoración;
- trastornos del sueño;
- dolor muscular, sensación de debilidad;
- debilidad general, fatiga;
- pérdida de peso, pérdida del apetito.
Las formas asintomáticas de patología pueden manifestarse con hemorragia pulmonar masiva.
Infectados o no: rutas de transmisión
Un paciente con una forma secundaria de la enfermedad es contagioso en cualquier etapa del desarrollo de infiltrados. Junto con el esputo, se liberan micobacterias activas, que permanecen en los artículos del hogar y penetran en los pulmones de otras personas en contacto cercano.
La infección se produce principalmente por gotitas en el aire, al toser, estornudar o hablar. La varita de Koch también se puede transmitir a través del contacto diario: a través de artículos de higiene personal, platos, ropa de cama, etc. En muebles, telas, libros y ropa, permanece activo hasta 5-6 meses.
Al vivir juntos, la infección puede ocurrir a través del polvo en el aire. En gotas secas de esputo, que se mezclan con partículas de epitelio y suciedad, la micobacteria sobrevive hasta 1 año.
En el polvo de la calle con luz difusa, el patógeno permanece durante 1,5-2 meses. Si la flema se seca a la luz solar directa, la micobacteria muere.
Información importante: El cuadro clínico del desarrollo de la tuberculosis pulmonar cavernosa en adultos.
Las siguientes vías de infección son menos comunes:
- alimenticio (a través de alimentos - carne cruda, leche, queso, etc.);
- a través del agua infectada;
- transplacentario (de una madre enferma a un feto).
En los niños pequeños, la infección por Mycobacterium tuberculosis puede ocurrir a través de la conjuntiva de los ojos.
Clasificación de infiltrados
El tipo de infiltración está determinado por su forma y densidad en una radiografía. Las formaciones pueden ser localizadas (bronco-lobulares, redondeadas, basales) o extensas (caseosas, lobares, marginales).
Redondo
Los infiltrados redondeados tienen densidad uniforme, contornos claros y tamaño pequeño. Con la progresión de la enfermedad, aparece un área de descomposición en el centro de educación. Las lesiones redondas se localizan principalmente en el segmento más superior de los pulmones (S1) cerca de la fosa clavicular.
La formación en forma de huevo puede tener una "pista" alargada, lo que le da el parecido a una raqueta de tenis. Las paredes de los bronquios cerca del área afectada siempre están engrosadas.
Los infiltrados redondeados ocurren con la tuberculosis en el contexto de una disminución moderada de la inmunidad.
Formación de nubes
Los focos en forma de nube tienen un contorno borroso, indistinto y de gran tamaño. En la radiografía, parecen áreas de oscurecimiento débil con varias áreas de descomposición.
Tales formaciones son propensas a una progresión rápida. En el tejido pulmonar afectado, aparecen rápidamente focos de necrosis y cavidades (cavidades).
Se forma una formación similar a una nube en los trastornos inmunitarios graves. En el desarrollo de la inflamación predominan los fenómenos exudativos y distróficos. Muy a menudo, varios segmentos del pulmón están involucrados en el proceso.
Desarrollando como neumonía caseosa
Con un curso desfavorable de la enfermedad, se diagnostica neumonía caseosa lobar. El proceso captura uno o más lóbulos de los pulmones. En la imagen, el área infectada se manifiesta por un oscurecimiento desigual con 1 o más focos de descomposición.
El desarrollo de infiltrados se acompaña de una extensa necrosis del tejido pulmonar, lo que empeora el pronóstico. En la mayoría de los casos, la neumonía caseosa se desarrolla en el contexto de estados de inmunodeficiencia: infección por VIH, embarazo, diabetes mellitus, etc.
Lobitis tuberculosa
Si, con la tuberculosis secundaria, todo el lóbulo del pulmón se ve afectado, entonces la infiltración se llama lobit. En este caso, se determina en la radiografía una gran área de oscurecimiento con densidad desigual y focos de descomposición. En la mayoría de los casos, el proceso involucra los segmentos superiores del pulmón.
La tuberculosis pulmonar se desarrolla en el contexto de trastornos inmunitarios graves. Las micobacterias se diseminan desde las cavidades de descomposición a través de los bronquios y la sangre.
Periscisurita (regional)
La periscisuritis es un infiltrado interlobulillar (marginal). Se encuentra en el espacio principal o accesorio entre los lóbulos pulmonares, a menudo afectando la pleura. En las imágenes, la lesión interlobar tiene una forma alargada y un borde claro.
La periscisuritis se desarrolla con trastornos inmunitarios graves.
Basal
La causa de la formación de infiltrados basales no son focos de infección en los pulmones, sino tuberculosis de los ganglios linfáticos intratorácicos. Las acumulaciones exudativas en las raíces de los pulmones son las más típicas de los niños. Las formaciones basales son menos propensas a la descomposición que las formaciones corticales.
Para el diagnóstico diferencial de los infiltrados pulmonares y radiculares, se requiere un examen de rayos X de múltiples ejes.
Induración broncobulillar
Las formaciones broncobulillares son pequeñas y están localizadas en los segmentos superiores de los pulmones (S1, S2). Los brotes pueden ser poligonales, triangulares o circulares.
Las focas lobulillares se desarrollan con inmunidad normal, por lo tanto, prevalecen los procesos exudativos en lugar de destructivos. Las áreas de destrucción de tejido son pequeñas o puntiformes. En algunos casos, aparecen cordones (adherencias) en las áreas afectadas, afectando la pleura costal.
Si hay varios infiltrados, se fusionan gradualmente, formando un sello con bordes irregulares y un área de descomposición en el centro.
Tamaños y fases de desarrollo
Los infiltrados tuberculosos pueden ser pequeños (hasta 2 cm), medianos (2-4 cm), grandes (4-6 cm) y extensos (más de 6 cm). Después de la formación de un foco inflamatorio, se produce su reabsorción, compactación o descomposición. Las fases de desarrollo de la infiltración están determinadas por su tipo y tamaño.
Información importante: El cuadro clínico del curso de la tuberculosis pulmonar fibrocavernosa.
Reabsorción
En esta fase se produce la reabsorción parcial o completa del infiltrado. Las cavidades resultantes están cubiertas de cicatrices y la liberación de exudado y masas necróticas disminuye o se detiene. En esta etapa, la condición del paciente mejora dramáticamente.
Sellando
En la fase de compactación, el infiltrado se encapsula en una densa membrana fibrosa. En la mayoría de los casos, esto ocurre cuando las lesiones son pequeñas.
El cese del proceso inflamatorio antes de la etapa de descomposición reduce la infecciosidad del paciente, pero empeora el pronóstico. Un avance de la cápsula fibrosa y una recaída de la enfermedad pueden ocurrir en cualquier momento.
Decaer
La desintegración del infiltrado se acompaña de la destrucción del tejido pulmonar infectado y la formación de cavidades. En esta fase, ocurre la liberación más activa del patógeno al ambiente externo. El paciente debe mantenerse separado de las personas sanas y recibir atención médica.
Siembra
En la etapa de siembra, se forman pequeños focos de infección alrededor del infiltrado principal. Esta fase puede ser casi asintomática o con ligeras fluctuaciones de temperatura. A medida que avanza la enfermedad, las formaciones se fusionan y la condición del paciente se deteriora drásticamente.
Características clínicas del curso de la tuberculosis pulmonar infiltrativa.
Para lesiones extensas, una manifestación aguda es característica, y para infiltrados locales, es característico un curso borrado o asintomático.
Varios tipos de formaciones tienen las siguientes características clínicas:
- infiltrados bronco-lobulares y redondos: síndrome astenovegetativo, dolor de los músculos del hombro, un ligero retraso en la mitad afectada del tórax durante la respiración, se puede desarrollar pleuresía;
- formaciones turbias, periscisurita: intoxicación grave (según el tamaño y la etapa del proceso), tos húmeda, en algunos casos, hemoptisis;
- lobit: una fuerte tos productiva, intoxicación severa con fluctuaciones de temperatura debido a la aparición de focos de abandono.
Con el desarrollo de infiltrados del tipo de neumonía caseosa, hay una tos húmeda intensa, fiebre (hasta + 40... 41 ° C), escalofríos, debilidad severa.
Métodos de diagnóstico
Los siguientes métodos se utilizan para diagnosticar la tuberculosis infiltrativa:
- radiografía;
- CT, MRI;
- prueba de tuberculina;
- análisis de sangre general y bioquímico;
- broncoscopia con examen bacteriológico;
- ELISA, PCR de sangre y esputo;
- prueba de quantiferon;
- auscultación, percusión torácica, etc.
Diferencias diferenciales
El diagnóstico diferencial de la enfermedad se realiza con neumonía cruposa y atípica, síndrome de Leffler, actinomicosis, candidiasis del sistema respiratorio, cáncer e infarto pulmonar.
Diagnóstico diferencial de infiltrados tuberculosos
Enfermedad | Signos de rayos x | Síntomas | Cambios en el recuento sanguíneo | Otros signos |
Tuberculosis | Sombra homogénea o no homogénea con focos de descomposición | Fiebre, tos húmeda de sangre, signos de intoxicación. | Aumento de la VSG, desplazamiento de la fórmula de leucocitos hacia la izquierda (hasta el 30% de los neutrófilos por puñalada), con curso severo: anemia | Reacción positiva de Mantoux |
Neumonía cruposa | Infiltración homogénea de un lóbulo o segmento, predominantemente en la parte baja o media del pulmón | Dolor de esternón, debilidad, dificultad para respirar, tos húmeda, flema oxidada | Leucocitosis, aumento de la VSG, desplazamiento del recuento de leucocitos hacia la izquierda | Mejora rápida de la condición en el contexto del tratamiento con antibióticos. |
Cáncer de pulmón | Formación volumétrica homogénea, atelectasia, defecto de llenado bronquial, cordones gruesos | Tos (seca o con poca flema), hemoptisis | Aumento de la VSG, anemia, leucocitosis moderada | Agrandamiento de los ganglios linfáticos supraclaviculares e intratorácicos con metástasis |
Infiltrado eosinofílico (síndrome de Loeffler) | Uno o más infiltrados con un contorno vago o redondeado | Tos con esputo amarillo brillante, leve intoxicación. | Eosinofilia (10-70% de leucocitos) | Prueba de alergia o prueba de parásitos positiva |
Infarto de pulmón | Oscurecimiento triangular con ápice en la raíz del pulmón, localizado en el lóbulo medio o inferior | Dificultad para respirar, taquicardia, fiebre, tos, dolor torácico agudo, hemoptisis | Hipercoagulación | Sobrecarga del corazón derecho en el ECG |
Actinomicosis | Un infiltrado denso que ocupa un lóbulo o segmento del pulmón se localiza con mayor frecuencia en la parte inferior del pulmón. | Tos, fiebre, hemoptisis, dolor de pecho | Aumento de la VSG, leucocitosis intensa | Se acompaña de engrosamiento de la pleura y daño óseo. |
Candidiasis | Infiltrarse con contornos vagos, a menudo en el lóbulo medio o inferior del pulmón | Tos con una pequeña cantidad de secreción, temperatura en el rango de + 37... 39 ° С | Aglutinación cuando se mezcla con una preparación de anticuerpos anti-Candida | A menudo combinado con estomatitis fúngica, faringitis, laringitis o glositis |
Información importante: El cuadro clínico del desarrollo de la pleuresía tuberculosa en humanos.
Principios de tratamiento
Para el tratamiento de la forma infiltrativa de la tuberculosis, se utilizan medicamentos (conservadores) y métodos quirúrgicos. Se pueden usar remedios caseros para aumentar el tono general y aliviar la tos.
Terapia de drogas
Para el tratamiento de la tuberculosis, se recetan los siguientes medicamentos:
- antibióticos (rifampicina, isoniazida, etambutol, etc.);
- inmunomoduladores;
- glucocorticosteroides;
- vitaminas, antioxidantes;
- mucolíticos;
- hepatoprotectores.
Con un curso de medicación correctamente seleccionado y el cumplimiento de las reglas de tratamiento, los síntomas clínicos desaparecen después de 3-4 semanas. La reabsorción de focos y el cese de la excreción de bacilos ocurren 3-6 meses después del inicio de la terapia.
Intervención quirúrgica
Con necrosis extensa, se prescribe tratamiento quirúrgico. Dependiendo del tamaño de la lesión, se extrae un segmento, un lóbulo o todo el pulmón.
En algunos casos, se prescribe toracoplastia interpleural. En esta operación, no solo se eliminan los segmentos afectados del pulmón, sino también varias costillas.
Las principales indicaciones de la intervención quirúrgica son el sangrado en la cavidad, la pleuresía purulenta y la tuberculosis fibrocavernosa, que no se puede detener con un neumotórax artificial.
Remedios caseros
La medicina tradicional se puede utilizar además de los tratamientos conservadores y quirúrgicos.
Los remedios caseros más efectivos son:
- hierbas medicinales (nudo, brotes de abedul, eneldo, ortiga, equinácea, romero silvestre, etc.);
- productos apícolas (propóleo, pan de abeja, miel);
- grasas animales (pescado, tejón, oso, etc.);
- áloe;
- ajo;
- momia.
Pronóstico de recuperación
El pronóstico de la tuberculosis infiltrativa puede ser:
- favorable (reabsorción completa);
- relativamente favorable (reabsorción parcial, calcificación de un foco caseoso, formación de una cicatriz o tuberculoma);
- desfavorable (la formación de grandes cavidades con contenido caseoso-purulento, el desarrollo de complicaciones).
El pronóstico de recuperación depende de la ubicación, forma y tamaño de los infiltrados. Con pequeñas formaciones, se produce una reabsorción completa, y con focas grandes y extensas, el desarrollo de neumonía, la formación de cavidades y tuberculomas.
El proceso del lado derecho se caracteriza por un bajo riesgo de disfunción cardíaca y complicaciones durante la cirugía. Desde los segmentos superiores del pulmón izquierdo, la infección puede penetrar los vasos del miocardio. Esto provoca el desarrollo de arritmias, miocarditis y miocardiopatías.
Si los focos están ubicados en los segmentos inferiores de los pulmones, la eliminación de las masas caseosas es complicada. Con la progresión de la enfermedad, se forman nuevos infiltrados, se desarrolla tuberculosis bronquial. La derrota de los lóbulos inferiores se observa en solo el 3% de los pacientes. El pronóstico de recuperación en tales pacientes es desfavorable.
Posibles complicaciones
El proceso de infiltración puede resultar complicado:
- neumonía caseosa, tuberculosis fibroso-cavernosa;
- cardiomiopatía;
- meningitis tuberculosa;
- insuficiencia respiratoria, atelectasia pulmonar, pleuresía, neumotórax;
- septicemia.
Métodos de prevención
Para prevenir el desarrollo de tuberculosis secundaria, es necesario someterse a fluorografía anualmente, observar las reglas de higiene, comer bien y tratar las infecciones crónicas de manera oportuna.
Con inmunodeficiencia y contacto constante con los pacientes, es importante la revacunación regular con vacuna BCG.